Después de más de 10 años de entrenamiento con pesas, había llegado a mi límite. 90 kg. No podía llegar más lejos sin ayuda externa.
Desde que empecé a usar las inyecciones de testosterona, he alcanzado otro nivel. Ahora peso 98 kg con el cuerpo delgado y definido, todo gracias a un único tratamiento.
Siento que mi progreso ahora no tiene límites. Tengo ganas de comenzar mi segundo tratamiento para ver hasta dónde me puede llevar este producto.
Este producto es mágico.